En cuanto al cambio climático antropogénico se puede decir que ya es un hecho donde las consecuencias medioambientales son la pérdida de toda biodiversidad, desertificación, aumentos en el nivel del mar, entre otros factores a consideras. A nivel social, está la agricultura afectada, los efectos que tienen sobre la salud, etc.
Y en términos de geopolíticas, la lucha entre los distintos países por los recursos en donde cada día se van haciendo más escasos, se comienza a dilucidar todo. Es por ello que estamos en frente de un escenario destructivo en donde, todavía, la esperanza está presente y trae consigo la ciencia y la tecnología para enfrentar toda adversidad.
Se había señalado eso en el Quinto Informe de Evaluación (AR5) por parte del IPCC, del mismo modo que la iniciativa para invertir miles de millones de dólares en el progreso tecnológico que logren frenar todo calentamiento global que se presentó en la cumbre climática de París (COP21) terminando el año de 2015.
Buenas noticias en donde, no obstante, son únicamente la punta del lápiz, ya que en esa vía han estado trabajando varios científicos desde hace un bue periodo. El resultado reciente de ese esfuerzo es un ingenioso sistema subterráneo el cual ha sido construido por investigadores del Lawrene Livermore National Laboratory, de la Ohio State University, de la Universidad de Minnesota y de la compañía TerraCOH, Inc en Estados Unidos.
Toda tecnología lograría solucionar las cuestiones fundamentales vinculadas al cambio climático, señala el Lawrence Livermore National Laboratory; por una parte, sería factible el suministrar continuamente de energía renovable y limpia y por otro, dejaría la disminución de toda emisión de CO2 contaminante, debido a que lograría almacenar el CO2 bajo tierra de manera permanente, para su máximo aprovechamiento. El CO2 es uno de los gases que se encargan de originar ese efecto invernadero.
