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La historia y evolución de la máquina de coser

La historia y evolución de la máquina de coser viene muy ligada al desarrollo de la humanidad como sociedad. Recordemos que, desde tiempos inmemoriales, el uso de la ropa ha tenido un impacto tremendo en nuestra forma de vida. Desde los primeros atuendos que se registraron hace más de 170 mil años, a la actualidad, la ropa ha significado un punto importante para la sociedad. En primera instancia, nos ayuda a proteger nuestro cuerpo de las inclemencias del ambiente (frio, calor, lluvia, etc.), como también nos brinda comodidad y bienestar social. Hoy por hoy, estar sin ropa en público es considerado una vergüenza, e incluso en algunos países es penado por la ley. 

Antes de la invención y popularización de artilugios, la confección de la ropa y de cualquier otro textil estaban muy limitados. Todos los trabajos con tela, se tenían que hacerse a mano, por lo que la producción en masa de prendas de vestir era prácticamente imposible. Tanto las familias, como los sastres más profesionales, realizaban sus trabajos con una aguja e hilo, tal y como se venía haciendo desde la antigüedad. 

El hecho de que apareciera una máquina que pudiera realizar el trabajo textil, de forma más rápida y segura, impresionó a más de uno. Incluso, algunos sastres de la época, llegaron a satanizar tal invención, temiendo que les fuera a robar todo el protagonismo en la industria textil. 

En este artículo, te narraremos la historia y evolución de la máquina de coser. Además, te contaremos un poco sobre, las diferencias entre una máquina de coser doméstica y una industrial. 

Historia de la máquina de coser

historia de la maquina de coser
La primera máquina de coser era de madera y muy poco eficiente

Esta historia tiene diversas vertientes, algunas sitúan los primeros pasos de este invento en la Inglaterra de 1755; luego en Austria de 1819, posteriormente en Estados Unidos 1826. Aunque ninguna de ellas tuvo real importancia en la historia como tal.  

La primera máquina de coser que tuvo un real significado en la historia, fue diseñada y desarrollada por el francés Barthélemy Thimonnier 1830. Thimonnier, ideó una máquina fabricada en madera, la cual era capaz de dar una puntada de un solo hilo. Si bien es cierto, el proceso no era mucho más rápido que uno realizado a mano, aun así, llamó la atención del gobierno francés. A tal punto que, recibió una patente en 1830, con el fin de producir uniformes en masa para el ejército de Francia. 

Esto causo furor entre las masas, cientos de sastres se sintieron indignados, y temiendo que eso los fuera a dejar fuera del negocio, formaron una horda y atacaron la casa de Thimonnier, quien logró huir a Londres, pero perdió todas sus máquinas. En 1848, nuevamente sacó al mercado su máquina de coser, está vez en Inglaterra, donde tampoco tuvo éxito.  

Segunda era de la máquina de coser

La segunda influencia más importante de las máquinas actuales, tuvo lugar en Nueva York, entre los años 1832 y 1834, cuando Walter Hunt, diseñó un modelo de máquina de coser con un concepto más innovador. Lamentablemente, Hunt nunca llegó a patentar ese modelo. Por otro lado, Elias Howe, si logró desarrollar y patenta su aparato en 1846, eso sí, muy parecida al modelo de Hunt. Donde la máquina poseía una aguja curva con punta de ojo. Dicha aguja se movía en un arco, llevando el hilo a través de la tela. Por otro lado, se entrelazaba con un segundo hilo, impulsado por una lanzadera que se movía de un lado a otro, a través de una pista. 

El modelo de Howe causó tanto impacto, que fue copiado por múltiples empresas. Aun así, el éxito rotundo en la industria de las máquinas de bordar y de coser, no llegó sino hasta 1851. Cuando el también nacido en Nueva York, Isaac Merrit Singer le dio los toques finales a la obra maestra. Y de verdad, se empezó a revolucionar el mundo de la industria textil.  

Tercera era de la máquina de coser

Entre las características más importantes de la máquina de Singer es que, tenía incorporado un pedal que, hacía funcionar el mecanismo de la máquina, impulsado por el pie del operario. Por otro lado, le agregó una rueda dentada para el movimiento semiautomático de la tela, entre cada puntada. 

Además, le introdujo un sistema para pensar las telas, evitando que el tejido se moviera, y que la costura siguiera su camino. Otro detalle adicional es que, en las de Singer, no se usaba un gancho para coser, sino que disponía de una aguja perforada. 

Todo esto hizo que la máquina de coser desarrollada por Singer triunfara en el mercado, convirtiéndose en la marca más importante de la actualidad.

Evolución de la máquina de coser

Las máquinas de coser Singer revolucionaron la industria textil

No cabe duda que con la llegada de las máquinas de coser Singer al mercado, se marcó un antes y un después en la industria textil. No solo por las innovaciones tecnologías del aparato en sí, sino la forma que se introdujo en el mercado. En tan solo unas décadas, las máquinas de coser se convirtieron en una necesidad para casi todos los hogares. 

Singer en el año 1889, desarrolló y sacó a la venta la primera máquina eléctrica, impulsada con un motor eléctrico de Edison. Con un simple motor de aproximadamente 1/8 de HP (caballo de fuerza), alimentado por energía eléctrica, facilitó el trabajo aún más. Llegando a hincar hasta 800 puntadas por minuto, un verdadero progreso. Con el antiguo pedal, tan solo se alcanzaban entre 200 a 400 puntadas.  

Al sol de hoy, los productos las máquinas de coser están cada vez más avanzadas. A tal punto que, en la actualidad son mucho más fáciles de usar, más potentes y precisas. Incluso, pueden ser operadas sin problemas por personas invidentes o con visibilidad reducida, ya que poseen un sensor que interrumpe el circuito en caso de que, se acerque mucho la mano a las agujas. 

Diferencias entre máquinas industriales y domésticas

Las máquinas de coser industriales son mucho más robustas y potentes

Las máquinas de coser en la actualidad, han avanzado mucho, y podemos encontrar una gran variedad de productos distintos en el mercado. Aun así, básicamente su funcionamiento es el mismo en todas, solo algunas características en cuanto a diseño y algunas funciones adicionales, marcan un poco la diferencia. 

No obstante, es posible clasificar a las máquinas de coser de acuerdo a las ramas a las que estén destinadas. Es decir, en base a su utilidad. A continuación, cada una de ellas: 

  • Máquinas de uso doméstico
  • Máquinas semi-industriales
  • Máquinas industriales

Las máquinas de coser de uso industrial, por obvias razones son muchas más grandes, potentes y rápidas. Estas, deben soportar gran intensidad de trabajo, por lo que posee motores más grandes, y resistentes. Se utilizan para la producción en masa de prendas de vestir, alfombras, sábanas, etc. Las máquinas de coser industriales, son prácticamente genéricas, es decir; sus partes son compatibles con casi cualquier otra máquina industrial. Para saber más sobre estas máquinas.

Por su parte, las máquinas domésticas, son mucho más pequeñas, con acabados más precisos y elegantes. Algunas, pueden ser instaladas sobre mesas especiales, otorgándole y comodidad a sus usuarios.  Otro detalle es que, las máquinas domesticas poseen características y piezas distintas de acuerdo a cada marca, por lo que sus repuestos son bien específicos. Se usan más que todo, para confecciones caseras, y cualquier trabajo que no requiera muchas horas de dedicación. 

La tecnología cada día nos hace la vida más fácil, tal es así, que la evolución de la máquina de coser ha marcado un antes y un después en la industria textil. 

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