Rendimos homenaje a los grandes
programadores, creadores de estos lenguajes, indescifrables para la mayoría.
Un montón de letras y signos se mueve y parpadea por la pantalla mientras emiten un ligero fulgor pálido. La mano derecha abandona el ratón y se une a la izquierda en los rápidos movimientos sobre el teclado, mientras las líneas de código crecen y crecen.
Pocos comprenderán lo que está pasando detrás de ese código, pero miles de millones de “1” y “0” están viajando de un lugar a otro; y solucionando problemas en los ordenadores de todo el mundo. Ese programador, junto a otros tantos en todas partes, está dando forma al futuro de la informática.
Actualmente, parece imposible imaginarse un mundo sin computadoras. Ese invento, que llevaba desarrollándose desde hacía mucho tiempo; y que salió de las sombras en la segunda mitad del siglo XX parecía más un paquidermo que una herramienta y solo algunos elegidos comprendían qué estaba pasando por todas esas estanterías de cables.
Ahora, nuestro bolsillo guarda una computadora mil veces más poderoso que cualquiera de esa época. Y somos capaces de hacer cosas impensables hace unas décadas. La tecnología ha superado cualquier expectativa.
Y, ese gran avance que hemos vivido y que actualmente disfrutamos ha llegado gracias a genios de todas partes que vieron una mina en bruto en ese extraño mundo que era la informática. Listas de personas que aprendieron, innovaron e incluso inventaron nuevas formas de hacer crecer a ese inmenso campo del conocimiento y de que este llegase a las personas de a pie.
Al igual que la base de la historia apareció con la escritura, el corazón y las raíces de la informática están en los lenguajes de programación. Con ellos, como por arte de html, los programas, sistemas y aplicaciones nacen y mueren, se actualizan y resuelven los errores que van apareciendo. En un mundo tan grande como lo es esa computadora que hay sobre la mesa, estos son algunos de los programadores más importantes de la historia.
Grandes programadores
Ada Lovelace: Nadie pensaría, al observar la imagen de esta dama inglesa del siglo XIX, que se encuentra ante la que es considerada la primera programadora informática del mundo. Fue conocida por su trabajo sobre la máquina calculadora mecánica de Charles Babbage y en su trabajo se encontró el que hoy se conoce como primer algoritmo para ser procesado por un ordenador.
La Condesa de Lovelace es, además, la única mujer que da nombre a un lenguaje de programación: el ADA, creado por el Departamento de Defensa de Estados Unidos.
Alan Turing: precursor de la inteligencia artificial y de la informática moderna. Su famosa prueba, “el test de Turing”, sirve para demostrar si una máquina posee inteligencia. Además, participó en el diseño del ACE (Automatic Computer Engine), descifró los códigos de la máquina nazi Enigma durante la Segunda Guerra Mundial y realizó diversos estudios sobre biología matemática.
Mark Zuckerberg: Con tan solo 20 años, Zuckerberg abandonó sus estudios en la Universidad de Harvard y creó la famosa red social Facebook sus compañeros de habitación. Este genio de la computación se considera una de las personas más influyentes en el mundo de la tecnología y es la quinta persona más rica del mundo, con una fortuna estimada de más de 62.8 miles de millones de dólares.
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