Actualmente estamos en una constante batallar por alcanzar la eficiencia energética, desde todos los ámbitos de la sociedad. Sin duda, uno de los elementos más trabajados para lograr la preciada eficiencia es la iluminación. Como sabemos, la luz es vital para la civilización actual, nos permite ver claramente incluso en las épocas donde escasea el sol o en las habitaciones que no alcanza la iluminación natural.
Con el tiempo hemos desarrollado diferentes tipos de focos, intentando encontrar la bombilla perfecta. Aquella que tenga una larga vida útil, que consuma poco energía, pero que ilumine lo suficiente bien para que podamos desarrollar nuestras actividades de la mejor manera posible.
Hemos pasado por la bombilla incandescente, que fue el inicio de la civilización iluminada. Poco después, le dimos vida a la incandescente de halógeno, una versión mejorada que su antecesora, con mayor resistencia y producción lumínica. Posteriormente llegó a nosotros la bombilla fluorescente, la cual supuso un salto tecnológico impresionante, ya empezamos a pensar en eficiencia energética y en horas uso, teniendo una duración hasta 3 veces mayor que sus antecesoras. Finalmente le dimos luz verde a las bombillas LED, que son hoy las amas y señoras de la iluminación global.
La tecnología LED ha sido el paso más grande que hemos dado para alcanzar la eficiencia energética en cuanto a iluminación. Sin embargo, gracias al poder de la ciencia y la ingeniería, hemos desarrollado también tecnologías complementarias que nos permite ahorrar mucho más, basándonos en sistemas que reaccionan ante acciones determinadas, por ejemplo: fotosensibilidad, permitiendo que el alumbrado público encienda automáticamente solo cuando sea necesario, y con sensores de movimiento, haciendo que las luces se enciendan solo cuando detectan a una persona dentro de un espacio determinado.
Justamente de estas ultimas, quisimos preparar en este oportunidad este artículo, para mostrarte las enormes ventajas de las lámparas con sensores de movimiento. No sin antes, hablarte un poco más sobre esta tecnología y sus características.
¿Qué son y cómo funcionan las lámparas con sensores de movimiento?
Las lámparas con sensores de movimiento, por lo general son un sistema de iluminación cualquiera, que se le añade un dispositivo que tiene la capacidad de reaccionar al detectar movimiento dentro de un espacio determinado. Al reaccionar detona un accionador que enciende o apaga un juego de luces.
Hoy en día, existen diferentes tipos de sensores, cada uno realiza reacciona en función de la forma que perciben el movimiento. A continuación, los más comunes:
- Ultrasónicos
- Infrarrojos
- Sensores duales
- Bluetooth
Si bien es cierto no es el único uso que se le da, las lamparas con sensores de movimiento son especialmente útiles en el exterior y en zonas comunes, donde existe un tráfico de personas lo suficientemente esporádico, para no tener que dejar las luces prendidas todo el tiempo. Nos referimos a espacios comunes de comunidades de vecinos, por ejemplo pasillos o entradas. Sin embargo, también se pueden instalar en viviendas unifamiliares, bien sea en el exterior, en la cochera, en el jardín o en una habitación en concreto.
Lo más interesante de todo es que, estas lámparas encajan perfectamente en cualquier estilo de decoración, ya que son diseñadas con una gran cantidad de modelos, colores y formas. Entra en Lámparas en Línea para maravillarte con su gran catálogo de iluminación de exterior.
Ventajas de las lámparas con sensores de movimiento
Posiblemente la mayor ventaja de las lámparas con sensores de movimiento es que, sin importar el lugar donde fueron instaladas, proporcionan una iluminación totalmente eficiente. Se mantendrán encendidas solo en aquellas estancias donde detecten que efectivamente hay alguna persona y se apagarán inmediatamente después de que esta se retira.
Esto evidentemente supone un ahorro energético impresionante. Además facilita notablemente la vida a las personas, especialmente a aquellas que estén en situación de movilidad reducida, ya que no tendrán que desplazarse hasta el interruptor para encenderlas. Es de mencionar que, la mayoría de estas lámparas son perfectamente configurables para evitar que se enciendan cuando detecten el ingreso de un mascota.
Sin más dilación, empecemos con las principales ventajas de las lámparas con sensores de movimiento:
1. Son un excelente mecanismo de seguridad
Aunque no lo consideres así, el encendido automático de una luz puede evitar que se perpetre un robo en nuestra vivienda. Cuando las luces de exterior detecten cualquier presencia, se encenderán, confundiendo a los intrusos pensando que hay alguien atento. Por otro lado, a ningún amigo de lo ajeno le gusta entrar a una vivienda bien iluminada, ya que tiene más posibilidades de ser sorprendidos.
Otro detalle interesante de las bombillas con sensores de movimiento es que aportan mucho al confort y a la comodidad de las estancias donde se instalaron, ya que evitan la necesidad de buscar el interruptor tanto para encenderlo y apagarlo. Esto es especialmente útil en lugares muy oscuros, como una cochera o en la entrada de la vivienda donde hay escaleras, así mismo en zonas de trabajo donde pocas veces se tienen las manos desocupadas.
Este tipo de luces también ayuda notablemente a los adultos mayores o personas con problemas de movilidad, quienes por lo general tienen sus manos ocuparas para desplazarse.
3. Eficiencia energética
Quisimos finalizar el artículo, hablando precisamente de la eficiente energética, cosa que fue también el inicio del mismo. Básicamente las lámparas con sensores de movimiento se diseñaron para que estas se prendan y se apaguen cuando no detecten la presencia de alguien donde de su rango de acción, para de esta manera ahorrar energía.
Entonces, la principal ventaja de este tipo de iluminación es que solo consumirá energía cuando realmente se necesite. Entonces en lugares como el exterior de la vivienda, en zonas comunes de las comunidades de vecinos, en baños de oficinas pasillos y otros espacios poco concurridos y que le presente poca atención a apagar la luz, estas lámparas con la mejor opción.
Sin embargo, es importante considerar para que efectivamente pueda suponer un ahorro energético considerable, debemos asegurarnos que la instalación sea la adecuada, utilizando productos de calidad y asesorados por expertos. Ya que, una incorrecta instalación podría generar apagados y encendidos no deseados, afectando la vida útil de la lámparas y perjudicando la experiencia del usuario.
