Alfred Nobel y su explosivo invento: La Dinamita

Alfred Nobel y su explosivo invento: La Dinamita
Alfred Nobel y su explosivo invento: La Dinamita

Alfred Nobel, es considerablemente más popular por los premios que llevan su nombre que por su propio trabajo; pero si Alfred Nobel no hubiera hecho riqueza al inventar la dinamita, tampoco estarían los galardones científicos más prestigiosos del planeta.

Alfred nació en Estocolmo en 1833, su padre era ingeniero y montó una fábrica de armamento en San Petersburgo; así que anduvo parte de su juventud en la que en aquel momento fuera la capital de Rusia. Fue un químico, ingeniero, inventor y fabricante de armas sueco; conocido sobre todo por la invención de la dinamita, además de por la creación de los galardones que llevan su nombre: los Premios Nobel.

Alfred Nobel, es considerablemente más popular por los premios que llevan su nombre que por su propio trabajo
Alfred Nobel, es considerablemente más popular por los premios que llevan su nombre que por su propio trabajo

Alfred Nobel, nacido en una familia de ingenieros no es de extrañar que desde muy pequeño se interesara por esta temática. Acompañado de una intensa formación en ciencias naturales y humanidades

A lo largo de sus 63 años de vida, Nobel registró 350 patentes y su nombre sigue presente en muchos frentes; como con el elemento químico Nobelio, el asteroide (6032) llamado Nobel; o un cráter localizado en la cara oculta de la Luna. Sin contar los prestigiosos Premios Nobel que se iniciaron con una donación del propio Nobel por más de 30 millones de coronas (cerca de 4 millones de euros).

Esta eminencia científica falleció el 10 de diciembre de 1896 a causa de un ataque cardíaco. Algunas de sus frases más célebres: “Si tuviera mil ideas y sólo una resultase ser buena, estaría satisfecho”; “El hogar es donde trabajo y trabajo en todas partes”, “Yo no dejaría nada a un hombre de acción, pues se vería tentado a dejar de trabajar; por otro lado, me gustaría ayudar a los soñadores ya que les resulta difícil conseguirlo en la vida”.

No obstante, tras amasarse su riqueza, algún sentimiento de culpa también debió de surgir en este hombre, así que creó la Fundación Nobel en 1900 para conferir los galardones que hoy conocemos a personas que ayudan al bien de la humanidad en las áreas de la física, la química, la medicina, la literatura y la paz. En 1969 se añadió el de la economía.

(También puedes leer: Gerty Cori, la primera ganadora del Nobel de Medicina)