Hablemos de malas hierbas, todas aquellas plantas que nacen en lugares no adecuados. Controladas principalmente con Glifosato, un agente altamente contaminante y dañino para la salud.
Sin embargo, desde 2015 una gran campaña ha buscado cambiar estos productos tóxicos por algunos más suaves para el ambiente. Por esta razón, aumentan las alternativas de productos para el control de malas hierbas.
Lo natural siempre es mejor, pero existen miles de alternativas utilizadas por los agricultores y hasta por los amantes de las plantas, para alejar cualquier mala hierba de su zona, sin herbicidas.
También puedes leer: El envejecer y la soledad ya no serán un problema gracias a la inteligencia artificial
Métodos alternativos para la gestión de malas hierbas
Manuales, mecánicos y térmicos:
-Manuales: la escarba de los terrenos para eliminar la mala hierba es uno de los métodos, utilizados en zonas pequeñas. Demanda más tiempo, pero se pueden utilizar en los bordes de paredes y aceras.
-Mecánicos: existen varios tipos de maquinarias que pueden ser utilizada, en esta escarba se amplía el terreno que se trabaja. Es ideal para zonas abiertas como plazas.
-Térmica: se trata del uso del calor para lograr acabar con la mala hierba. No es quemarlo si no deshidratarla. Generalmente se utiliza gas, brutano o propano.
Cubierta vegetal:
Este método es empleado por lo general por quienes quieren evitar el crecimiento desmedido de la planta no deseada. Se trata de sembrar plantas que eviten el crecimiento de la mala hierba, el más utilizado es el césped.
No solo sirve para reducir a la mala hierba si no también para evitar la erosión del suelo. Además, aumenta filtración del agua, minimiza la evaporación del agua en el suelo.
Aprovechando las plantas
En este punto las plantas que segregan alelopatías, ayudan a reducir el crecimiento de la hierba no deseada. El sorgo, la alfalfa, el centeno y los espárragos son los más utilizados para hacer este trabajo.
Protección del suelo
Este método supone el uso de mallas y de acolchados, que simulan el césped. También se pueden utilizar las orgánicas, tales como paja o restos de corteza. No solo sirve para detener la mala hierba si no para que las plantas crezcan más fuertes.
También puedes leer:
Las baterías de ión de litio serán más seguras con esta nueva técnica
