Angelina Arora, la adolescente que inventó un plástico biodegradable en Sydney

Angelina Arora

A veces las genialidades y los inventos más asombrosos no vienen de la mano de científicos prestigiosos. A veces, hasta los adolescentes pueden sorprendernos con una primicia científica con el simple motivo de ayudar al planeta. Este es el caso de Angelina Arora, estudiante de la Sydney Girls High School.

La chica de 16 años de edad mantenía una preocupación latente por el planeta. El futuro del mismo, viéndose amenazado por culpa de la contaminación. Tiene razones, pues es increíble la cantidad de plásticos que se lanzan al océano y lo dañan, poniendo en riesgo su fauna. Y ese fue el motivo principal por el que comenzó a investigar cómo hacer un plástico biodegradable.

Puedes leer: Nikola Tesla, el irreverente Genio olvidado por décadas

Angelina Arora y las bolsas biodegradables a base de gambas

La muchacha cuenta su historia, donde consigue muchas opciones desde donde empezar, aunque una sola fue el éxito rotundo. Primero utilizó desechos orgánicos como las cáscaras de los plátanos, para ver si servían como materia prima. Poco a poco, fue desplazando sus intentos, hasta que localizó los caparazones de las gambas y allí encontró su triunfo.

Resulta que estos camarones poseen un caparazón cuya composición se asemeja al plástico. La quitina, un compuesto carbohidrato de los mismos, le sirvió a Angelina Arora para convertirlo en quitosano. Posteriormente, mezcló su resultado con fibroína, una proteína que viene de los capullos de seda. El resultado fue sorprendente.

Un material similar al plástico que además, se descomponía mucho más rápido. El descubrimiento y la invención de Angelina coincidieron con lo que buscaba. Estas nuevas bolsas, podían durar lo suficiente para servir su propósito, y luego de 33 días, descomponerse para así no hacerle daño al ambiente.

La adolescente obtuvo así el Premio Innovador al mercado dentro de los Premios de Ciencia e Ingeniería de la Fundación BHP Billiton en el 2018. También obtuvo un reconocimiento a nivel internacional dentro de la Feria Internacional de Ciencia e Ingeniería patrocinado por Intel. Allí, Angelina se hizo con el cuarto premio, y además consiguió una beca para estudiar en Estados Unidos.

Un plástico que tarda 1.5 millones de veces menos en descomponerse que el producto original es un hito sin dudas en la historia. Esperamos que se puedan ver pronto las bolsas biodegradables en todas partes del mundo, y así evitar la contaminación de los mares.

Fuente: CSIRO

También te puede interesar:

Alan Turing padre de la informática moderna