Ransomware al alza: ¿Estamos preparados para la nueva ola de ciberataques?

aumenta el ransomware

Desde hace años vivimos en una guerra cada vez más feroz y agresiva en contra de los piratas informáticos. En años anteriores, cuando hablábamos de estos personajes, por lo general eran personas que se dedicaban a “piratear” o clonar archivos o softwares para compartirlo por alguna web o plataforma digital. Los más antiguos en esto, podemos recordar a Pirate Bay como un lugar donde encontrábamos prácticamente todo. 

Desafortunadamente, no sabemos si esos mismos piratas se volvieron más cruentos, o aparecieron nuevos delicuentes. Lo cierto es que ahora roban es información personal, e incluso la secuestran. De hacho a eso se le conoce como ransomware, que es básicamente una forma de malware que encripta los datos de la víctima, exigiendo un rescate para su liberación.

Lo cierto del caso es que, según las estadísticas, las amenazas de ransomware se duplica. Este aumento significativo contrasta marcadamente con la tendencia decreciente en otras formas de malware. Es fundamental comprender las razones detrás de este cambio y cómo afecta tanto a individuos como a organizaciones.

El aumento en los ataques de ransomware no es un fenómeno aislado; refleja una evolución en las tácticas de los ciberdelincuentes. Con la digitalización cada vez más omnipresente en nuestra vida cotidiana y empresarial, los datos se han convertido en un activo inmensamente valioso. Los ciberatacantes lo saben y, por lo tanto, se dirigen hacia métodos más lucrativos. 

En este artículo, queremos ver por qué aumenta el ransomware, en comparación con la disminución general del malware. Analizaremos las causas de esta tendencia, sus implicaciones para individuos y empresas, y discutiremos estrategias efectivas para prevenir y responder a estos ataques. 

Aumenta el ransomware de manera alarmante mientras que el malware está en declive

Como veníamos adelantando, el año 2023 ha sido testigo de un incremento alarmante en los ataques de ransomware a nivel mundial. Según cifras, se registraron 10.000 millones de ataques, marcando un aumento del 30% respecto al año anterior. Este crecimiento se ha visto acompañado por un aumento del 82% en el costo promedio de un ataque, alcanzando los $1,4 millones. Estos datos reflejan un cambio preocupante en el panorama de la ciberseguridad, afectando principalmente a sectores críticos como sanidad, educación, gobierno y finanzas.

En nuestro país, la situación es igualmente grave. El ransomware aumenta un 25%, con 200.000 incidentes reportados en 2023. El impacto económico de estos ataques es considerable, con un costo promedio que se elevó a 800.000 euros, un 75% más en comparación con 2022. Las pymes, así como las administraciones públicas y hospitales, han sido los sectores más golpeados, evidenciando una vulnerabilidad particular en estas áreas.

Por otro lado, los ataques de malware convencionales están en declive tanto a nivel mundial como en España. Globalmente, se registraron 5.000 millones de ataques, una disminución del 15%, y en España, los ataques disminuyeron un 10%, con 1.000 millones de incidentes. Panda Security, una autoridad en el campo de la ciberseguridad, destaca el phishing, los troyanos y el software espía como los tipos de malware más comunes. Este cambio en las tendencias sugiere una evolución en las estrategias de los ciberdelincuentes, priorizando el ransomware por su rentabilidad.

Desentrañando las Causas del Aumento del Ransomware

Después de analizar el notable incremento en los ataques de secuestro de información y su contrastante relación con el declive del malware convencional, es importante entender las causas detrás de esta tendencia. Los datos y tendencias de ransomware nos revelan un escenario donde múltiples factores convergen, alimentando el crecimiento de estos ataques.

El ransomware, en su sofisticación creciente, no surge en un vacío; su aumento está anclado en dinámicas específicas del ciberespacio. Las empresas y usuarios, a menudo desprevenidos, se encuentran en una carrera contra reloj para adaptarse a estas amenazas.

Conocer estos factores es fundamental para desarrollar estrategias de prevención y respuesta más efectivas.

  • Rentabilidad para los ciberdelincuentes: el atractivo económico de los ataques de ransomware es innegable. La posibilidad de obtener grandes sumas de dinero, combinada con un riesgo relativamente bajo de ser atrapados, ha convertido estos ataques en una opción predilecta para los criminales.
  • Explotación de vulnerabilidades: las debilidades en sistemas y aplicaciones son puertas abiertas para los atacantes. La falta de mantenimiento, como la ausencia de actualizaciones de seguridad, crea oportunidades ideales para la infiltración y el despliegue de ransomware.
  • Crecimiento del teletrabajo: la pandemia ha acelerado la adopción del trabajo remoto, ampliando la superficie de ataque. Muchos empleados en casa carecen de las medidas de seguridad robustas presentes en entornos corporativos, aumentando así la vulnerabilidad.
  • Profesionalización de los ciberdelincuentes: los grupos detrás de los ataques de ransomware han evolucionado hasta convertirse en operaciones altamente sofisticadas. Disponen de recursos y herramientas avanzadas, lo que les permite ejecutar ataques complejos y coordinados.
  • Falta de preparación: a pesar de la creciente amenaza, muchas organizaciones y usuarios individuales no están adecuadamente equipados para enfrentar un ataque de ransomware. La carencia de políticas de seguridad adecuadas y planes de respuesta a incidentes incrementa significativamente el riesgo y el impacto de estos ataques.

Fortaleciendo defensas: estrategias anti-ransomware

Después entender por qué aumenta el ransomware, ahora podemos estudiar algunos consejos que nos permitirán fortalecer nuestras defensas. Si bien es cierto, estamos en una era donde estos ataques se vuelven cada vez más sofisticados, es obligatorio que  también adoptemos estrategias técnicas y profesionales avanzadas para protegerse.

  • Implementación de backups robustos: asegurar copias de seguridad regulares y fuera de línea de datos críticos. Es esencial que estos backups estén aislados de la red para evitar su compromiso durante un ataque de ransomware.
  • Actualización y parcheo continuo: mantener los sistemas operativos y el software constantemente actualizados. Aplicar parches de seguridad rápidamente para mitigar vulnerabilidades conocidas que podrían ser explotadas.
  • Segmentación de redes:dividir las redes en segmentos para limitar el movimiento lateral de los atacantes. Esto ayuda a restringir el alcance del daño en caso de una brecha de seguridad.
  • Formación y concienciación de empleados: proporcionar formación regular sobre ciberseguridad para sensibilizar a los empleados sobre los riesgos del ransomware y enseñarles a identificar intentos de phishing y otras tácticas de ingeniería social.
  • Uso de soluciones de seguridad avanzadas: implementar herramientas de seguridad como firewalls de próxima generación, sistemas de detección y respuesta de endpoints (EDR), y soluciones anti-ransomware específicas.
  • Planificación de respuesta a incidentes: desarrollar y mantener un plan de respuesta a incidentes de ciberseguridad, incluyendo protocolos específicos para ataques de ransomware. Esto debe incluir procedimientos de comunicación interna y externa, así como estrategias de recuperación.
  • Monitoreo y análisis continuo: utilizar la monitorización constante de la red y el análisis de comportamiento para detectar actividad sospechosa rápidamente y responder antes de que el ransomware se despliegue o se propague.

Como hemos visto, el aumento del ransomware es un desafío que requiere una respuesta multifacética. Desde la implementación de defensas técnicas avanzadas hasta la educación continua en ciberseguridad, cada paso es crucial para mitigar el riesgo. Sin embargo, es igualmente importante estar preparados para el peor escenario, con pasos para recuperarse de un ransomware bien definidos en nuestros planes de respuesta a incidentes. La resiliencia en ciberseguridad no se trata solo de prevenir ataques, sino también de tener la capacidad de recuperarse de manera eficiente y eficaz cuando estos ocurren.

 

Kelvin Goyo
Agroecólogo de profesión, analista SEO por convicción, redactor por motivación y científico de corazón. Eterno estudiante de ciencias naturales, tecnologías, marketing 2.0 y economía. "No busquemos el éxito, persigamos la excelencia y el éxito nos perseguirá a nosotros"