El agua es para nosotros, lo que la electricidad es para la industria y la economía global. Si hemos de categorizar los elementos más vitales que mueven a la sociedad, quizás esas dos se encuentren en el top 3. Según datos del Instituto Mundial de Energía, cerca del 85% de todas las actividades productivas dependen directa o indirectamente de la electricidad. Vivimos en una era donde el suministro energético es esencial; desde el coche que nos lleva al trabajo, la bomba que surte agua potable en la ciudad, hasta el ordenador desde el cual ejecutamos nuestras tareas cotidianas.
Ahora bien, la industria, columna vertebral de la economía, y esta requiere de un flujo energético constante y estable. Cualquier fallo o avería eléctrica inesperada puede traducirse en pérdidas cuantiosas; según el Instituto Español de Estadística, las interrupciones eléctricas han costado a la industria ibérica más de 2.000 millones de euros en el último año. Son cifras que ninguna empresa desea enfrentar, especialmente en un mundo tan competitivo.
Es por ello que nos pareció interesante estudiar un poco sobre este tema, para mostrarle tanto a las empresas y al público en general estar un paso adelante, y puedan identificar y entender las averías eléctricas más frecuentes, lo que les permita establecer estrategias preventivas.
En ese contexto, preparamos este artículo con las fallas eléctricas más comunes, sus causas y, lo más importante, cómo prevenirlas y actuar ante ellas. La prevención es, sin duda, la herramienta más poderosa en manos de cualquier profesional.
¿Qué son las averías eléctricas y por qué deberíamos conocerlas?
Cuando hablamos de las averías eléctricas, nos referimos a los fallos o defectos que se producen en las estaciones energéticas o en los equipos conectados a ellas. Estas pueden ser causadas por diversos motivos, como problemas en los componentes, desgaste natural o factores externos como subidas de tensión.
Es esencial comprender que estas fallas no solo pueden suponer un corte de energía sino que, en ocasiones, representan un riesgo significativo tanto para la integridad de los equipos como para la seguridad de las personas. Datos de la Asociación Española de Distribuidores de Electricidad, reflejan que más del 40% de averías en equipos industriales se deben a problemas eléctricos.
Instalaciones eléctricas bien mantenidas y supervisadas es posiblemente, una de las mejores opciones que tenemos para disminuir la probabilidad de estas fallas. No obstante, cuando ocurren, las implicaciones pueden ser vastas algunas que perjudican directamente a la empresa, otras por su parte, de forma indirecta.
Veamos algunas de estas consecuencias negativas de las averías eléctricas comunes:
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Consecuencias directas:
- Interrupción del suministro de energía
- Daño o destrucción de equipos y maquinaria
- Riesgos de incendio o explosiones debido a chispas o sobrecalentamiento
- Lesiones físicas, incluso electrocuciones.
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Consecuencias indirectas:
- Pérdida de datos o información en sistemas informáticos
- Tiempos de inactividad en la producción o servicios, generando pérdidas económicas
- Costes adicionales en reparaciones y reemplazo de equipos
- Disminución de la confianza o reputación si afecta a servicios al público.
Cuáles son las averías eléctricas más frecuentes
Como hemos venido comentado, la electricidad industrial juega un papel crucial en el desarrollo y funcionamiento de prácticamente todos los sectores de nuestra economía. Desde la manufactura hasta los servicios, un flujo de energía constante y confiable es esencial para garantizar que las operaciones se desarrollen sin interrupciones. Desafortunadamente, al igual que cualquier otro sistema, las redes eléctricas no están exentas de fallos. Yal es así que, el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) en Valencia, afirma que el 30% de las interrupciones en procesos industriales están relacionadas con problemas eléctricos.
Dichos fallos además de generar pérdidas económicas cuantiosas, también pueden ser el origen de accidentes y situaciones de riesgo para los operadores, como para la integridad del la organización como tal. Por esta razón, es esencial conocer cuáles son las averías eléctricas más frecuentes en el ámbito industrial.
Si manejamos esta información, seguramente podremos establecer protocolos de prevención y respuesta, minimizando así el impacto negativo de estos inconvenientes y garantizando la seguridad de sus trabajadores y activos. A continuación, veremos en detalle estos fallos y cómo enfrentarlos adecuadamente:
1. Sobrecargas eléctricas
La primera en nuestra lista son las sobrecargas eléctricas, porque son uno de los eventos de mal funcionamiento energético más comunes en las industrias, pero también afecta a hogares y a oficinas. Estas se producen cuando el flujo de corriente supera la capacidad de conducción segura de un circuito. Esto puede generar un calentamiento excesivo y, en el peor de los casos, provocar un incendio.
Esto ocurre muchas veces cuando se conectan demasiados dispositivos a una sola toma o se utilizan extensiones de manera inapropiada. Pero también puede pasar por el uso de cables o equipos averiados, y se potencia aún más si la instalación eléctrica es antigua o está defectuosa.
Recomendaciones:
- Evitar conectar muchos aparatos en una sola toma
- Usar extensiones con sistemas de protección incorporados
- Realizar revisiones eléctricas periódicas por profesionales.
2. Cortocircuitos
Siempre escuchamos el término de cortocircuito, pero pocos sabemos exactamente a qué se refiere. Pues se trata de una conexión no deseada entre dos puntos de un circuito, lo que resulta en una corriente excesivamente alta. Son consideradas una de las averías eléctricas más frecuentes, pero además son extremadamente peligrosos, ya que generan un gran calor en un corto periodo, pudiendo provocar un incendio.
Los cortocircuitos pueden ser causados por cables desgastados o dañados, conexiones flojas o el contacto de materiales o elementos conductores con partes del circuito eléctrico, por ejemplo agua u otros líquidos con conductividad.
Recomendaciones:
- Inspeccionar periódicamente el estado de los cables y reemplazar los dañados
- Asegurarse de que las conexiones estén bien aseguradas
- Evitar derrames de líquidos cerca de instalaciones eléctricas.
3. Fallos en el diferencial
El diferencial es un dispositivo de seguridad en las instalaciones eléctricas, está diseñado para desconectar automáticamente el suministro eléctrico cuando detecta una fuga de corriente a tierra. Si el este componente salta frecuentemente, indica que existe algún problema en la instalación, que puede ser causado por un dispositivo defectuoso o un problema de aislamiento, conexiones con aislamientos dañados o una incorrecta instalación eléctrica.
Recomendaciones:
- Desconectar y revisar cada equipo eléctrico para identificar posibles fallos
- Inspeccionar el aislamiento de las conexiones eléctricas
- Consultar con un electricista profesional para evaluar y corregir la instalación.
4. Problemas con el neutro
El neutro es esencial en las instalaciones eléctricas, ya que desempeña un papel fundamental en la distribución equitativa de la energía. Si este presenta problemas, se pueden generar fluctuaciones de voltaje que afectan el funcionamiento de los dispositivos conectados, pudiendo en el peor de los casos dañarlos.
Al igual que con otras averías, las principales causa se deben a conexiones flojas, corrosión, daño en el cable neutro o por perturbaciones en la red eléctrica.
Recomendaciones:
- Revisar y ajustar las conexiones del neutro en el cuadro eléctrico
- Reemplazar cables dañados o corroídos
- Utilizar protectores de sobretensión para los dispositivos sensibles.
5. Falta de aislamiento en equipos eléctricos
La última de las averías frecuentes que hoy os presentamos es la aislamiento defectuoso en equipos eléctricos. Se trata de un problema que es particularmente recurrente en sistemas que han estado en funcionamiento durante muchos años. Esta condición suele ser resultado del desgaste natural, pero también puede ser acelerada por condiciones externas adversas como la humedad o el contacto con sustancias corrosivas.
Recomendaciones:
- Revisar periódicamente el estado del aislamiento
- Evitar la exposición a agentes corrosivos
- Realizar mantenimientos preventivos
- En zonas de alta humedad, considerar la utilización de aislantes especiales.
No cabe duda que lidiar con averías eléctricas puede ser complejo y, en ocasiones, peligroso si no se tiene el conocimiento adecuado. Por esta razón, siempre es recomendable contar con el apoyo de empresas especializadas en el ámbito energético. Ellas, con su vasta experiencia, están preparadas para solucionar urgencias eléctricas de manera eficiente y fiable. Si te encontráis ante un problema eléctrico, no dudes en contactar con profesionales como Certifica Energía Sevilla, que garantizarán una intervención rápida y segura, protegiendo tanto los equipos como el bienestar general de la organización.
