Lo contradictorio del clima. Es una situación que tiene confusos a los científicos. Mientras Europa sufre el frío extremo como consecuencia de “la bestia del este”. El Polo Norte experimenta un embate de calor.
Contradictorio e intrigados están los meteorólogos.
Europa se envuelve en un enorme manto blanco por la llamada “la bestia del este” y diversas de sus ciudades están en temperaturas bajo cero. Y el Polo Norte está especialmente cálido.
Al menos para lo que se espera en este punto del planeta en esta época del año.
La estación meteorológica Cape Morris Jesup, en Groenlandia, registró temperaturas de hasta 6,1 ºC. Llegando incluso a los 7,2 ºC.
Eso es mucho más que los -15 ºC que han alcanzado los termómetros en algunas partes de Reino Unido.
Las imágenes satelitales que han logrado observar los meteorólogos revelan cómo el viento está empujando aire con temperaturas por encima de los 0 ºC hacia el Ártico.
Los científicos no descartan que esto sea un resultado más del cambio climático, pero no consiguen afirmarlo.
Lo que sí pueden ratificar es que en los últimos tres años se han ido registrando temperaturas récord en el Ártico y pronostican que las olas de calor sean periódicas, más intensas y de mayor duración en el futuro.
Contradictorio del clima. Las malas noticias son que las temperaturas superen los 0 ºC en el Polo Norte solo puede traer problemas, aseguran.
“Ese es el punto en el que todo cambia. Es considerablemente excepcional”, expresó un geofísico del Observatorio Terrestre Lamont-Doherty, perteneciente a la Universidad de Columbia, en Nueva York, Estados Unidos.
El alza de las temperaturas hace que el hielo sea más delgado y menos denso y, por tanto, más sensible al calor.
Si el hielo se disuelve más fácilmente, esto puede perturbar a todo el sistema meteorológico ártico. Además de que puede alterar notablemente al nivel del mar, con resultados climatológicos para todo el planeta.
Los picos rápidos de temperaturas son un fenómeno meteorológico común, inclusive en el Ártico. Lo que inquieta a los científicos es que esa frecuencia aumente.
Eso, unido a unas temperaturas globales en aumento, es para los científicos una clara señal de que el clima está cambiando incluso más rápido de lo que se pensaba hace unos años.
