El corazón eléctrico de las naves industriales: ¿Por qué es crucial su diseño y mantenimiento?

Instalaciones eléctricas en naves industriales

Indudablemente, uno de los recursos más importantes para cualquier industria es la energía eléctrica. Es el motor que impulsa toda la maquinaria productiva de la organización. No obstante, tener acceso a esta fuente vital no garantiza automáticamente la eficiencia y seguridad en su uso. Es aquí donde se evidencia la trascendencia de una correcta infraestructura.

Ahora bien, es importante señalar que, cuando hablamos de alimentar energéticamente una industria, no basta con conectarla a la red pública y listo. De hecho, según datos del Instituto de la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el consumo energético en la industria representa alrededor del 29% del total nacional en España.

Esto pone de manifiesto la envergadura de la demanda. Sino que, requiere de complejas instalaciones eléctricas y componentes, que no solo distribuirán la corriente eléctrica de manera eficiente, sino que deben estar preparadas para demandas mucho más exigentes y contar con todas las medidas de seguridad pertinentes.

A lo largo de este artículo, se abordarán los elementos fundamentales de las instalaciones eléctricas en naves industriales, desde los transformadores de potencia hasta los sistemas de iluminación. Profundizaremos en la importancia de su mantenimiento y cómo garantizar la máxima eficiencia energética y seguridad en estos espacios. Adéntrate en este universo eléctrico y descubre por qué es un pilar en la industria moderna.

¿Qué son las instalaciones eléctricas en naves industriales?

Qué son las instalaciones eléctricas en naves industriales

En el mundo industrial, la energía eléctrica es el pilar sobre el cual se alimenta la maquinaria, la tecnología y, en esencia, toda la operatividad. Las instalaciones eléctricas en naves industriales, por ende, son mucho más que simples conexiones a la red.

Son infraestructuras meticulosamente diseñadas que, más allá de solo suministrar energía, garantizan que esta llegue de manera eficaz, segura y acorde a las demandas del espacio industrial. Según el Instituto de la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), las industrias españolas tienen un consumo energético significativo, por lo que la importancia de un sistema robusto y confiable en estas naves es incontestable.

Estas instalaciones eléctricas se construyen pensando en la versatilidad y las particularidades de cada industria. No es lo mismo alimentar una fábrica de ensamblaje automotriz que una planta de procesamiento de alimentos. Así, adaptar y diseñar específicamente cada sistema para responder a las necesidades de la nave industrial en cuestión es esencial. Este enfoque personalizado garantiza la optimización del recurso eléctrico, la seguridad operacional y, por supuesto, la eficiencia en la producción.

Características de las naves industriales:

  • Espacios amplios: diseñados para albergar maquinaria de gran tamaño y permitir un flujo de trabajo continuo.
  • Flexibilidad estructural: posibilitan adaptaciones o modificaciones según las necesidades de la actividad industrial.
  • Ubicación estratégica: generalmente situadas en polígonos industriales con acceso a vías principales.
  • Sistemas de seguridad: tanto físicos como electrónicos, adaptados a la actividad que se desarrolla en su interior.
  • Aislamiento especializado: a menudo poseen sistemas de aislamiento térmico y acústico, atendiendo a las particularidades de la producción.

Componentes esenciales en la electricidad industrial

Al entrar en la profunda red de las instalaciones eléctricas en naves industriales implica entender sus componentes esenciales. Estos elementos no solo garantizan un flujo eléctrico constante y seguro, sino que además se adaptan a las particularidades de cada sector.

Hemos recopilado algunos de los componentes más importantes dentro de las instalaciones eléctricas en naves industriales, y a continuación, los nombramos: 

1. Transformadores de potencia

Los transformadores son vitales para adaptar los niveles de tensión de la red eléctrica a las necesidades específicas de la industria. Estos equipos modulan la energía recibida para que sea utilizable por la maquinaria y los sistemas eléctricos internos, garantizando así su eficiencia y seguridad. Sin ellos, los equipos podrían sufrir daños o no funcionar adecuadamente.

2. Cuadros eléctricos

Los cuadros eléctricos son el cerebro de cualquier instalación eléctrica industrial. Agrupan y distribuyen todos los circuitos eléctricos presentes en la nave, protegiéndolos de sobrecargas o cortocircuitos. Además, facilitan el acceso para labores de mantenimiento, inspección o intervención en caso de fallos.

3. Sistemas de iluminación

Aunque pueda parecer un aspecto menor, la iluminación en las naves industriales es crucial. Una correcta iluminación no solo garantiza la visibilidad y seguridad del personal, sino que también puede influir en la productividad. Las soluciones de iluminación en la industria suelen ser de alto rendimiento y bajo consumo, priorizando la sostenibilidad y la eficiencia.

4. Sistemas de protección

Estos sistemas garantizan la seguridad de toda la infraestructura eléctrica y de quienes trabajan en ella. Incluyen interruptores, fusibles y diferenciales que detectan y responden ante cualquier anomalía en el sistema, como sobrecargas, picos de tensión o pérdidas de corriente, evitando posibles accidentes o daños en los equipos.

5. Cableado y canalizaciones

El cableado es el sistema circulatorio de la instalación eléctrica. A través de él, la energía fluye hacia cada rincón de la nave. Las canalizaciones, por su parte, protegen este cableado, ofreciendo una ruta segura y ordenada para su distribución. Estas deben ser resistentes y adecuadas para ambientes industriales, donde pueden estar expuestas a factores como la humedad, temperaturas extremas o agentes químicos.

Prevención y seguridad: Pilares del mantenimiento eléctrico

Prevención y seguridad Pilares del mantenimiento eléctrico

La prevención y la seguridad son conceptos intrínsecamente vinculados al mantenimiento eléctrico en cualquier instalación, especialmente en naves industriales. Las cifras del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social indican que un porcentaje significativo de accidentes laborales en España se relacionan con fallos eléctricos, y muchas de estas incidencias podrían evitarse con revisiones y mantenimientos adecuados. No solo hablamos de evitar fallos o interrupciones en la producción, sino también de garantizar la integridad de los trabajadores y de las infraestructuras.

El mantenimiento eléctrico proactivo, más allá de ser una simple rutina, es una inversión en la seguridad y en el futuro de una industria. Cuando se lleva a cabo de manera regular y rigurosa, permite detectar y rectificar posibles anomalías antes de que estas deriven en situaciones críticas, garantizando así un ambiente laboral seguro y una operativa eficiente y sin interrupciones.

Razones principales para realizar un mantenimiento eléctrico:

  • Prevenir accidentes: evitar posibles electrocuciones, incendios o daños en la maquinaria.
  • Optimizar la eficiencia: detectar puntos de pérdida de energía y mejorar el rendimiento del sistema.
  • Prolongar la vida útil: al cuidar y revisar regularmente los equipos, se extiende su periodo de funcionamiento.
  • Cumplir con regulaciones: muchas normativas exigen revisiones periódicas para garantizar la seguridad.
  • Minimizar costes: evitando fallos mayores o paradas no planificadas en la producción.

En las instalaciones eléctricas en naves industriales, la fiabilidad en el suministro energético es crucial para mantener operativos los equipos y maquinaria. Es importante destacar que, el campo de la electricidad industrial es altamente complejo y requiere la experiencia de profesionales cualificados.