Niños españoles poseen su primer teléfono a los 8 años, en 2012 era a los 11 que adquirían su primer móvil. Es por esto que España rebasa la media en Europa, según lo expresado en el libro “Entre selfies y Whatsapps”.
Este libro pretende ser una evaluación reciente acerca de la seguridad de niños en Internet.
Una de las coautoras del libro, estima que hay más conciencia acerca de los peligros en la red. A mayor uso, más exposición a los percances, no obstante el índice de los que padecen males es mínimo.
Un ejemplo de esto es que a pesar que el bullying es el peligro más perjudicial, es más común el riesgo en persona que el en línea, por lo que se debe evitar acusar a la tecnología.
Los escritores, sin embargo, estiman que además de los peligros deben apreciarse las ocasiones del acceder precozmente a las tecnologías.
Se han develado unas cifras acerca del análisis realizado. Para los niños su teléfono es algo que les posibilita estar en contacto con amigos (55%) y familia (25%).
Teléfonos y niños
Uno de cada cuatro niños, cree estar más a salvo cuando tiene su teléfono, además le admite estructurar su vida con facilidad. En otras palabras, dichos instrumentos tecnológicos se han transformado en algo básico para su estabilidad social.
Todo esto porque los niños tienen la capacidad de manejar su vida a partir de las tecnologías.
El estudio especifica que los padres vigilan el uso dado por sus hijos al Smartphone igual que con un móvil. Es decir, pese a que es posible controlar por gps, los padres están en entredicho al querer resguardar a sus hijos y respetar su intimidad.
Es por eso que no revisan todo lo que es posible por consideración a la intimidad de sus hijos.
