Euro 7: El cambio regulatorio que favorece a los coches eléctricos

impacto de la normativa Euro 7 en los coches de gasolina

Estamos viviendo sin lugar a dudas, el punto de quiebre de los motores a gasolina, dando paso a tecnologías mucho más silenciosas y por supuesto, menos contaminantes. Esto se evidencia en la gran cantidad de de regulaciones ambientales más rigurosas para los modelos convencionales y además, la evolución acelerada de tecnologías de propulsión alternativas. En este contexto, una de las normativas europeas que mayor controversia está causando a nivel regional es la Euro 7, que según los expertos, tiene todo el potencial para redefinir el mercado automotriz tal como lo conocemos.

La normativa Euro 7 viene con un objetivo bastante radical, reducir drásticamente las emisiones de los vehículos de combustión interna. Esto supone un desafío para los fabricantes de coches que, hasta ahora, siguen prefiriendo la fabricación de motores a gasolina y gasoil. Ahora, una vez implementada esta norma, se esperan cambios rotundos, tanto para las grandes marcas, como para los mismos consumidores.

Sin embargo, el precio del punto de recarga también ingresa al telón como protagonista en esta obra. Y es que, mientras más duras sean las normativas, los vehículos eléctricos se convertirán en una opción cada vez más atractiva. Sin embargo, al incrementar la demanda de estos, también será necesaria la implementación de puntos de recarga, para facilitar la transición de combustible fósil a eléctrico sin afectar la operatividad de los sistemas de transporte y el transporte en general en las ciudades. Además, que su coste sea equiparable a lo que nos presenta el modelo anterior.

En este artículo, queremos conocer de cerca el impacto de la normativa Euro 7 en los coches de gasolina y cómo esta situación beneficia a los vehículos eléctricos. Analicemos un poco que nos depara el futuro luego de esta medida estricta aplicada en toda la Unión Europea. 

¿Qué es la normativa Euro 7?

Los primeros indicios de la normativa Euro 7 se dieron a principios de la década de 1990, cuando la Unión Europea introdujo la normativa Euro 1 con el objetivo de regular las emisiones contaminantes de los vehículos de motor. Desde ahí en adelante, se ha implementado una nueva versión de esta normativa aproximadamente cada cinco años, con la intensión de seguir con la lucha para reducir las emisiones de los vehículos en toda la región.

La próxima modificación sería la normativa Euro 7, y estará destinada a establecer límites más bajos para las emisiones de gases de efecto invernadero producidos por los vehículos de motor. Esta norma no solo abordará los gases de escape, sino que también establecerá parámetros más estrictos para las emisiones en situaciones de conducción real y la durabilidad de los sistemas de control de emisiones.

Es importante señalar que, aún todavía no está oficialmente en vigor, se espera que la normativa Euro 7, la más estricta hasta la fecha, sea implementada a principios de 2025.

El objeto de la normativa Euro 7 es:

  • Reducir aún más las emisiones de los vehículos de combustión interna y mejorar la calidad del aire
  • Abordar las emisiones en las situaciones de conducción reales, más allá de las pruebas de laboratorio
  • Garantizar la durabilidad de los sistemas de control de emisiones en los vehículos a lo largo de su vida útil
  • Impulsar la transición hacia tecnologías de transporte más limpias, como los coches eléctricos
  • Ayudar a alcanzar los objetivos de la Unión Europea en cuanto a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero para así mitigar los efectos del cambio climático.

¿Cómo será el impacto de la normativa Euro 7 a los coches de gasolina?

Ha este punto es innegable la evidencia acumulada sobre los efectos negativos en el ambiente de los vehículos de combustión interna, en particular los alimentados con gasolina y diésel. Son fuertes emisores de gases contaminantes y partículas que no solo contribuyen al cambio climático, sino que también tienen un impacto negativo en la calidad del aire, lo que a su vez afecta la sanidad pública.

La introducción de la normativa Euro 7 supondrá un desafío considerable para los fabricantes que aún defiendan los coches de gasolina. Los límites de emisiones que se están proponiendo en esta norma son tan rigurosos que muchos creen que será extremadamente difícil, si no imposible, que los motores de combustión interna los cumplan sin una costosa reingeniería. Esta situación sin lugar a dudas, puede ser el detonante final para el desplazamiento de los vehículos de gasolina en favor de alternativas más limpias, como los eléctricos.

Además, es probable que la esta normativa también tenga un impacto significativo en los costos de producción, ya que los fabricantes tendrán que invertir más en la tecnología de control de emisiones para cumplir con los estrictos límites. Estos costos adicionales podrían trasladarse a los consumidores, aumentando los precios, obligando a muchos a elegir las opciones más ecológicas.

El auge de los coches eléctricos bajo la Euro 7

Creo que es evidente que los coches eléctricos serán los grandes ganadores luego de la implementación de la normativa.. Su inmunidad frente a las reglamentaciones de emisiones los sitúa en una posición privilegiada, ante la inminente necesidad de la población de implementar alternativas más sostenibles y menos dañinas con el ambiente. Además, la tendencia a la electrificación se ve acelerada por los esfuerzos gubernamentales y de la industria para aumentar la infraestructura de carga y reducir los costos de las baterías, lo que mejora la asequibilidad y la conveniencia de estos vehículos.

Además, este tipo de vehículos se podrían verse favorecidos por un cambio en la percepción de los consumidores. A medida que la conciencia sobre el cambio climático se amplifica, las tecnologías más amigables se convierten en un argumento de venta cada vez más poderoso. La eliminación de las emisiones de escape, la eficiencia energética superior y la compatibilidad con las energías renovables son solo algunas de las ventajas de los coches eléctricos que podrían atraer a los consumidores a medida que la normativa Euro 7 dificulta la vida los modelos tradicionales de gasolina.

No hay duda que el futuro de la movilidad está punto de cambiar, el reinado de los coches eléctricos se avecina una vez empiece la era de la normativa Euro 7. Como protagonistas emergentes en este cambio de paradigma, tienen el potencial de desempeñar un papel crucial en el camino hacia una movilidad sostenible. 

Kelvin Goyo
Agroecólogo de profesión, analista SEO por convicción, redactor por motivación y científico de corazón. Eterno estudiante de ciencias naturales, tecnologías, marketing 2.0 y economía. "No busquemos el éxito, persigamos la excelencia y el éxito nos perseguirá a nosotros"