Construcciones capaces de diagnosticar su propio estado interior

Era algo obvio que todas las tecnologías de la actualidad vayan cambiando poco a poco algunas construcciones donde ya se están empleando con el fin de optimizar cada eficiencia energética de cada edificio, se trata de otra utilización de estos nuevos avances para que cada casa se vaya reparando de manera independiente.

El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, ubicada en Estados Unidos) es uno de los encargados y centros más avanzados que están empleando cada nueva tecnología en las construcciones.

En él, Oral Buyukozturk, quien es profesor del Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental junto a su grupo han creado un modelo computacional el cual interpreta y le da coherencia a cada vibración ambiental (por ejemplo, de los camiones que pasan cerca de cada edificio o el movimiento que se genera bajo tierra) con el fin de hallar algunos signos de daños o tensión en la mecánica de cada construcción. El modelo lograría ser empleado para el monitoreo del “estado de salud” de cada construcción de manera continua.

Seguimiento continuo

La idea es que cuando tenga lugar algún terremoto al pasar un camión éstos hacen retumbar a la construcción, y cada vibración lograría viajar hasta el techo del edificio y crear algunos temblores transitorios por medio de pisos intermedios y vigas. Por lo que el novedoso sistema le deja, luego de ese tipo de eventos, calibrar de forma inmediata cada cambio que se ha generado por dichos movimientos en el entorno, conjuntamente, como los daños que esos hayan creado en el medio.   Gracias a ello, es factible el monitoreo asiduo de cada construcción, para crear una base de datos en su salud, lo que sería como la cartilla de cada médico.

Sistema nervioso introducido

De manera concreta, se trata de un método que consta de dos partes. Por un lado, está el modelo computacional ya dicho en donde se agregan tipo de parámetros e información del edifico como su fuerza y densidad de cada muro, viga, escalera, etc.

Y por el otro podemos hallar edificios a los que se les pondrían unos acelerómetros el cual detectaría cada vibración y movimiento en esos, desde los cimientos hasta el tejado. Es así como los autores del estudio mencionan que esos sensores lograrían ser un “sistema nervioso introducido”.