Cada vez con mayor frecuencia nos encontramos con casos de infecciones tratadas con antibióticos sin éxito. El mundo de las bacterias comienza a hacerse resistente contras estas medidas para curar infecciones. Todo gracias a su abuso en el mundo cotidiano.
Gracias a la medicina moderna, los patógenos más débiles mueren, mientras que los resistentes permanecen. Esto favorece su proliferación por encima del resto. Un futuro en el que el mundo se acabe por una peste incontrolable no sería alocado si visualizamos el panorama al que esto nos podría llevar.
Afortunadamente, la ciencia busca otros métodos menos radicales para tratar enfermedades. Sus estudios han dado avances interesantes. Mismos que nos podrían devolver a lo que serían medios “naturales” para así combatir las infecciones.
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Curar infecciones sin antibióticos
La primicia provino de un grupo de investigadores del Instituto Salk. En uno de sus estudios constataron cómo haciendo uso únicamente de suplementos de hierro, lograron que un grupo de ratones experimentales pudiera sobrevivir a una infección de cepas bacterianas consideradas como de las más letales para su especie.
Los roedores fueron expuestos a la bacteria digestiva Citrobacter rodentium, la cual en sus organismos produce diarrea, malestar, pérdida de peso hasta llevarlos a la muerte. La dosis de bacterias que recibieron fue la suficiente como para matarlos en el peor de los casos. El grupo pasó a ser dividido en dos según su alimentación: uno recibió una diera normal, y el otro tuvo una alimentación apoyada con hierro como complemento durante dos semanas.
Luego de 20 días, se notaron los resultados del experimento. Todo el grupo que se alimentaba normalmente había fallecido debido a la infección, mientras que el otro grupo que recibió hierro se mantuvo con vida. Lo que fue mejor, ¡pudieron controlar la infección evitando que se manifestaran los síntomas! El número de bacterias en ninguno de los casos varió. Lo que cambió fue la respuesta del cuerpo frente a los microorganismos.
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Una buena nutrición que impulse el metabolismo podría ser clave en las infecciones
Gracias a la ayuda recibida por el hierro suplementario, las reacciones metabólicas en el cuerpo de los ratones los ayudaron a controlar el equilibrio entre organismo roedor y las bacterias. Al final, las cepas de Citrobacter que se reproducían correspondieron a las más débiles de todas.
Los investigadores concluyeron que con un buen estado nutricional y metabólico, el cuerpo tiene mayores posibilidades de curar infecciones por bacterias. El mismo sistema inmunitario puede controlarlas, evitar que afecten el cuerpo humano. E incluso promover el desarrollo de las cepas más inofensivas.
No solo se trata del hierro lo que puede intervenir en estos casos. A lo que quieren llegar con este estudio es demostrar la importancia de una correcta alimentación. De la misma forma, el papel que juegan elementos naturales dentro de las infecciones para mantener la salud de los seres vivos. Quizá en los seres humanos sea algo parecido. No cabe duda de que más pronto que tarde la idea será comprobada y reafirmada.
¿Estaremos a un paso de decirle adiós al uso de los antibióticos?
Fuente: Medical Express
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