La evolución de los colchones a lo largo de la historia

historia y evolución de los colchones

El descanso y la calidad del sueño son aspectos fundamentales para el bienestar físico y mental de las personas. Y para lograr un sueño reparador, la elección de un buen colchón es esencial. Si bien es cierto esos son estudios recientes, durante siglos, la humanidad ha buscado la manera de mejorar el descanso y la comodidad en el sueño, por ello siempre hemos intentado desarrollar un espacio ideal donde dormir.

Los primeros indicios de cochones, distan muchísimo de lo que encontramos en la actualidad. En la antigüedad se empezó con paja y lana para rellenar sacos, ahora usamos espumas viscoelásticas y materiales termorreguladores. Además de eso, el diseño y la estructura de los mismos también han cambiado notablemente, todo para adaptarse a las nuevas necesidades, ser más útiles y versátiles.  

No cabe duda que los colchones se han convertido en pieza importante de la civilización, resultando imprescindibles en todos los hogares del planeta. Y es que, el buen sueño y el descanso, son fundamentales para garantizar la productividad y el bienestar de las personas. Por esa razón, la evolución de los colchones ha sido constante, a tal punto que en la actualidad incluso se diseñan para que puedan adaptarse a las distintas necesidades específicas que un individuo o familia puede tener, con la intención de ofrecerle el mayor confort posible.  

En este artículo, queremos precisamente repasar cómo ha sido la historia y la evolución de los colchones, desde el punto de vista de diseño y tecnológico, además repasaremos al final su importancia para nuestro día a día. 

Historia y evolución de los colchones

1. Los primeros colchones de la antigua Grecia y Roma

Maqueta generada por IA de un colchón romano
Maqueta generada por IA de un colchón romano

Los primeros colchones en la historia se remontan a la antigua Grecia y Roma, donde se utilizaban sacos rellenos de materiales blandos provenientes de fuentes orgánicas, tanto vegetal como animal. En Grecia, los colchones se llamaban pulvinus, y se cree que se utilizaban desde el siglo V a.C. En Roma por su parte, eran muy similares a los anteriores, pero llamados culcita.

Los colchones de la antigua roma eran de forma rectangular y se colocaban directamente en el suelo o en camas elevadas, depende la posición del ciudadano romano. Estaban fabricados con un armazón de madera cubierto de lana y rellenos de paja o plumas. Algunos también se rellenaban de lana y se colocaban sobre una base de redes de cuerda para mayor comodidad.

Claro que la comodidad de estos primeros colchones era bastante limitada, sin embargo, marcaron el inicio de la historia de los colchones. Con el paso del tiempo, se fueron añadiendo nuevos materiales, diseños para mejorar la comodidad y el sueño de las personas.

Es importante señalar que, incluso para este época donde el colchón “dio sus primeros pasos” con la humanidad, también surgieron las almohadas, aunque muy distintas a lo que conocemos en la actualidad. Por lo general eran más pequeñas, y la versión griega se fabricaban con madera o piedra, y se cubrían con una tela suave. Por su parte, las romanas sí se parecían más a las actuales, porque estaban rellenes de lana o plumas, cosa que todavía ocurre en algunos lugares. 

2. La Edad Media: del colchón de paja a los acolchados

La Edad Media o época medieval como también se le conoce, empezó justo después de la caída del Sacro Imperio Romano. Después de todos esos acontecimientos históricos que cambiaron el rumbo de Europa occidental, también se presentaron ciertos cambios en los colchones. Claro que durante los primeros años, el cochón siguió lleno de paja o lana, pero en el siglo XI empezaron a parecer unos un tanto más avanzados y cómodos.

Ya el término de colchón cobraba más sentido, porque surgieron colchones acolchados en Europa, que si bien es cierto, estaban rellenos de lanas o plumas, tenían un recubrimiento de tela que le otorgaba la propiedad de acolchado, lo que los hacía más suaves y cómodos para dormir.  

Pero eso no paró allí, conforme avanzaba la época medieval, también se fue perfeccionando la fabricación de los acolchados de los colchones, con materiales más sofisticados y diseños más elaborados. En el siglo XIII, se empezó a experimentar rellenarlos con crin de caballo, los cuales proporcionaban mayor soporte y durabilidad. Asimismo, se implementaron también los botones, para ajustar la cantidad de relleno de acuerdo a las preferencias y posibilidades de cada persona. 

Y es que, para esta época los colchones eran básicamente un artículo de lujo, y los mejores estaban al alcance de las clases más pudientes de la sociedad. Pero con el paso del tiempo, el avance de la tecnología, se abarataron los costos de producción, por lo que también bajaron de precio.

Es de mencionar también que, también para este periodo de la sociedad surgieron las camas, pero eran un poco distintas a lo que conocemos actualmente. Se trataba de estructuras fabricadas en madera, y con un diseño básico. Lo que conocemos hoy como cama de 2 plazas, no existía sino que eran más pequeñas y la usaban varias personas al mismo tiempo.

3. Los colchones de lana y pluma de ganso del Renacimiento y el siglo XVIII 

modelo de colchón renacentista
Modelo de colchón renacentista generado por la IA

La época del Renacimiento, como su nombre lo indica es cuando la humanidad empezó a dar un paso a las investigaciones científicas y las innovaciones tecnológicas. Por ello, en este periodo los colchones evolucionaron hacia materiales más suaves y lujosos, como la pluma de ganso, pero se mantuvo otros como la lana. Y es que colchones de lana fueron muy populares durante el Renacimiento, se rellenaban con lana de oveja o cordero, lo que los hacía cómodos y cálidos para dormir. En el siglo XVIII, se comenzaron a utilizar plumas de ganso, lo que les daba una mayor suavidad y confort.

En la época del Renacimiento, se empezaron a fabricar colchones con mayor calidad y lujosos en su diseño, decoración. Se añadieron detalles decorativos como botones, bordados, telas de seda y terciopelo, eso hizo que subieran su precio notablemente y estuvieran disponibles para la clase más pudiente. Aunque durante este período, se empezaron a producir en masa pero de menor calidad que los anteriores, lo que permitió que se hicieran más asequibles para la clase media.

4. Los colchones de muelles y la revolución industrial del siglo XIX

Posiblemente esta sea el primer paso a los colchones que ahora tenemos en nuestros hogares, todo gracias a la Revolución Industrial del Siglo XIX. Específicamente en 1865 surgieron los colchones de muelles (tienen una estructura interna de resortes de acero envueltos en tela, que proporcionan soporte y comodidad al cuerpo) patentado por Samuel Kettle, y se basaba en una serie de resortes de acero de acero envueltos en tela para proporcionar soporte y comodidad. 

Fue uno de los avances más importantes en la historia de los colchones, ya que permitía una mayor ventilación y durabilidad en comparación con sus antecesores. Además, se podía fabricar en diferentes tamaños y grosores, como por ejemplo, el cochón de 2 plazas y el individual, lo que permitía una mayor personalización para las necesidades de cada familia

A medida que avanzaba el siglo XIX, la fabricación de colchones se popularizó en todo el mundo. En la década de 1930, se desarrollaron colchones de muelles con espirales individuales, lo que le otorgó mayor comodidad aún. Con el tiempo, este tipo de colchones se convirtieron en los más populares en todo el mundo, y su diseño básico sigue siendo el mismo en la actualidad. Aunque, se han introducido nuevos materiales y tecnologías, que a continuación te comentaremos. 

5. Nuevos materiales y tecnologías para un descanso más saludable en la actualidad

Los colchones de muelles aún se mantienen vigentes en la actualidad, sin embargo desde el siglo XX a la actualidad, se han desarrollado nuevos materiales y tecnologías para mejorar el descanso y la salud. En la década de 1920, se introdujo la espuma de látex, para mejor soporte y comodidad. Posteriormente en 1970, se desarrolló la espuma de poliuretano, que permitía mejor adaptabilidad y durabilidad en comparación con otros materiales.

En los 80 se introdujo la espuma viscoelástica, que fue desarrollada por la NASA para mejorar la comodidad de los astronautas en el espacio. Este material se adapta al cuerpo y ayuda a aliviar la presión en las articulaciones y los músculos. Diez años después, se desarrollaron los colchones de aire ajustables, que permiten ajustar la firmeza y la altura según las necesidades de cada persona. También se introdujeron los colchones de agua, que proporcionan una sensación de flotar y reducen la presión en las articulaciones.

Las últimas tecnologías en los colchones incluyen materiales y diseños que mejoran la comodidad, el soporte, y la calidad del sueño. Algunas de estas tecnologías incluyen:

  • Espuma de memoria: la espuma de memoria se adapta al cuerpo y ayuda a aliviar la presión en las articulaciones y los músculos
  • Espuma de látex: la espuma de látex proporciona una mayor comodidad y soporte para el cuerpo
  • Materiales termorreguladores: el gel y la espuma de grafeno ayudan a mantener una temperatura adecuada en el colchón, para mejorar la calidad del sueño.
  • Colchones ajustables: permiten ajustar la firmeza y la altura del colchón según las necesidades de cada persona
  • Tecnología de enfriamiento: algunos colchones tienen tecnología de enfriamiento que reduce la temperatura del colchón, lo que puede ayudar a dormir mejor en climas cálidos.
  • Capas de amortiguación: algunas marcas de colchones tienen capas de amortiguación que reducen la transferencia de movimiento, lo que puede ser beneficioso para las parejas que tienen diferentes patrones de sueño.

La evolución de los colchones ha sido un proceso largo y complejo a lo largo de la historia. Desde los colchones primitivos hechos de paja hasta los colchones modernos de espuma de memoria y materiales termorreguladores, los avances en la tecnología y los materiales han permitido una mayor comodidad, soporte y calidad del sueño. A medida que la tecnología continúa evolucionando, es probable que veamos aún más avances en el diseño y la fabricación de colchones para satisfacer las necesidades individuales de cada persona.

Kelvin Goyo
Agroecólogo de profesión, analista SEO por convicción, redactor por motivación y científico de corazón. Eterno estudiante de ciencias naturales, tecnologías, marketing 2.0 y economía. "No busquemos el éxito, persigamos la excelencia y el éxito nos perseguirá a nosotros"