Lo que debemos saber sobre los aparejadores

funciones de un aparejador

Toda obra de construcción por más pequeña o simple que parezca, requiere de una serie herramientas, técnicas y materiales para poder llevarse a cabo. Adicionalmente, se necesita de una organización correcta, así como una disposición adecuada de los distintos materiales e insumos, por lo que es fundamental contar con un aparejador que se encargue de ello. 

Estos profesionales han sido desde mucho tiempo atrás, los responsables de velar por el buen funcionamiento de cualquier obra de construcción. Gracias a su experiencia, conocimiento y preparación, organizan todas las labores necesarias para que un proyecto finalice. Tal es así, que desde 1953 en nuestro país es totalmente obligatorio la intervención de un aparejador en toda obra de arquitectura. 

Es importante mencionar que en el pasado los aparejadores eran conocidos como maestros de obras, quienes se caracterizaban por ofrecer labores de preparación y ejecución de construcciones, subordinados al arquitecto de la obra. No obstante, el 24 de enero de 1855 a través del Decreto Luján, el título de aparejador sustituyó totalmente el de maestros de obras

Mucho después, mediante el Decreto 265/1971 se sustituyó el título de aparejador por el de arquitecto técnico. No obstante, en la actualidad se les sigue llamando aparejador. Sea cual sea su nombre, es uno de los profesionales más importantes en cada obra que se realice. Por esa razón, hemos elaborado este artículo, para enseñarte lo que necesitas saber sobre esta profesión, desde qué es, qué hace y cuáles son las funciones de un aparejador

¿Qué son los aparejadores?

Los aparejadores son técnicos profesionales que tienen la responsabilidad de atender una serie de funciones propias en la construcción de edificios. Estas personas deben estar al tanto de todos los elementos de una construcción, desde sus técnicas, herramientas y medios para la ejecución de la misma. 

Asimismo, deben velar por la disposición de elementos y materiales de construcción necesarios para el desarrollo de la obra. Es muy común encontrar un aparejador que sea el encargado de la obra o también, el coordinador de los equipos de trabajo, supervisando siempre la calidad y la eficiencia del trabajo realizado. 

El aparejador o también conocido como arquitecto técnico, no solo está supervisando la ejecución de la obra y los aspectos técnicos, también debe gestionar los recursos económicos, realizando mediciones sobre el consumo de recursos y el pago al personal. Por otro lado, deben asegurarse de que se trabaje bajo los más elevados estándares de seguridad, con las garantías de cuidado necesario para sus trabajadores. 

En pocas palabras, estos profesionales se encargan del anejo del proyecto para que pueda ejecutarse de la manera más optima posible, respetando todas las normas legales vigentes. 

Ahora bien, como podemos ver los aparejadores tienen una gran cantidad de responsabilidades, muchas de estas de suma importancia para cualquier construcción. Por ello, es vital que estén altamente capacitados y especializados en conocimientos técnicos, con un elevado análisis crítico, metódico y operativo sobre cada una de las actividades que se realizan en una obra civil. 

Por último, deben conocer al pie de la letra las normativas y reglamentos para velar por su cumplimiento, además de poseer un buen perfil de liderazgo, con habilidades comunicativas bien desarrolladas que les facilite el manejo correcto del personal obrero.

¿Qué se estudia para ser aparejador? 

El proceso para ser aparejador en la actualidad dista mucho a cómo era hace algún tiempo. Hoy en día, se trata de una carrera de estudio, en la que a través de los años se ha ampliado su campo de trabajo, obligando a los institutos a expandir y adaptar el temario de estudio a la época que vivimos. 

Debido a la gran cantidad de puestos que pueden ejercer, el perfil de preparación profesional debe ser mucho más grande y completo. En este sentido, al culminar el curso de Arquitectura Técnica y Edificación, el alumno será capaz de:

  • Conducir cualquier tipo de obra arquitectónica desde el punto de vista técnico
  • Administrar la producción de la obra 
  • Asesorar y realizar auditorias técnicas
  • Redactar proyectos de construcción

Así como muchas otras cosas inherentes a sus responsabilidades. Se trata de una carrera muy completa, con un amplio campo de trabajo, eso sí, siempre en el ámbito de la construcción y la arquitectura. 

¿Cuáles son las funciones de un aparejador? 

Como hemos visto hasta este momento, las funciones de un aparejador son muy variadas, a continuación, un pequeño listado con las más frecuentes: 

  • Avalúo y tasaciones de inmuebles
  • Emisión de certificados energéticos e informes periciales 
  • Pueden emitir certificados para la expedición de licencias y sobre la antigüedad del inmueble 
  • Coordinar planes de seguridad en la obra
  • Realizar inspección técnica de edificios 
  • Control de calidad en los trabajos realizados
  • Asesoramiento técnico para propietarios o para empresas constructoras 
  • Administración y gestión de recursos o materiales 
  • Atender contingencias en una obras 

Sin lugar a dudas, los aparejadores tienen una gran cantidad de funciones, pues son verdaderamente los encargados de asegurarse que la obra se desarrolle de manera correcta.

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