En América Latina, la yuca es un alimento muy usual dentro de los platos típicos de muchos países. Abunda, gracias a las condiciones climáticas de las tierras cercanas al Ecuador. Generalmente se le conoce como un ingrediente más para satisfacer el hambre, sin embargo, este año podría tener otro uso. Concretamente como material base para crear platos biodegradables.
El proyecto en cuestión para lograr esto está siendo dirigido por un grupo de investigadores. Todos pertenecen al equipo de Ciencia y Tecnología de Biomoléculas de Interés Agroindustrial de la Universidad del Cauca, ubicado en Colombia. Lo que se propusieron lograr, fue usar la harina de la yuca como materia prima para hacer algo fuera de lo esperado, y que además, pudiera ayudar a salvar al ambiente.
Después de un tiempo de investigación y pruebas, consiguieron crear un material biodegradable y semirrígido para fabricar utensilios. Concretamente, y de forma más adecuada, platos desde los cuales consumir alimentos. Todo con la simple presencia de la harina de yuca como protagonista.
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Los platos biodegradables además de ser amigables con el ambiente, son sustentables
Un producto que terminó obteniendo una patente de la Superintendencia de Industria y Comercio Colombiana. Y es que las características que ofrece, la hacen viable y consumible como cualquier otro producto.
Los platos biodegradables no sólo contienen harina de yuca. También están hechos de fibra de fique, con una capa que las recubre de gelatina y cera de abejas. Al ser semirrígido, posee características idóneas para realizar recipientes como platos, o envases donde almacenar otro tipo de alimentos sólidos.
Esta sería una alternativa sumamente eficiente y limpia para el ecosistema, sin alterar el uso normal de los platos desechables en la sociedad. Bien sabemos que los actuales están hechos de un material imposible de degradarse sino después de 500 años, que forman parte de la montaña de desechos que tienen al planeta tierra en un estado de contaminación actual preocupante.
Teniendo en cuenta el enorme crecimiento de la yuca en países de América latina, y lo económico que resulta este tubérculo, la idea de tener utensilios hechos de este material no es alocado o exagerado, sino perfectamente viable.
¿Te parece esta una buena opción para sustituir los platos desechables actuales? Seguramente el ambiente nos lo agradecerá con fuerza.
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