Una nueva cámara llega a las cirugías tumorales

Una cámara para operar

Una nueva herramienta llega a las manos de los cirujanos para las intervenciones de tumores. Se trata de un dispositivo cuya visión permite detectar con claridad dónde está el tejido canceroso y hasta donde extirparlo en las operaciones.

La resolución de las enfermedades neoplásicas siempre aspiran a ser primeramente, mediante cirugías. Generalmente se opta por esta alternativa cuando el tumor se encuentra lo suficientemente delimitado. Y no ha hecho metástasis hacia otros órganos. Sin embargo, a la hora de proceder, no es tan sencillo como suena. A veces resulta complicado determinar la extensión del tumor. Y a partir de dónde empieza el tejido sano.

Muchos factores dificultan el trabajo. Principalmente la iluminación. Y lo costoso de otros equipos más especializados para detectar el tejido canceroso. Por eso este nuevo invento promete ser de ayuda para cualquier unidad de salud que disponga de servicios para operar tumores.

 

Una cámara integrada que revolucionará el mundo de las intervenciones quirúrgicas tumorales

El artículo puede integrarse a los lentes del cirujano. Funciona con una visión excepcional copiada de la mariposa Morpho. Dicho insecto diurno, posee una vista excelente frente a la luz. Es capaz de captar con facilidad las emisiones infrarrojas y así tener la capacidad de abarcar grandes extensiones de terreno con sus ojos.

Basándose en este principio, con este dispositivo en el quirófano, será fácil detectar señales infrarrojas. Éstas provenientes de una tinción que es afín o se une fácilmente al tejido tumoral. De modo que en una sola intervención se podrá extirparlo todo. Resolviendo la enfermedad y reduciendo el riesgo de tener que repetir otra operación en un tiempo futuro.

Ya ha sido probada en procedimientos experimentales en ratones, siendo sumamente efectiva. Lo mismo en intervenciones, esta vez humanas, de casos de cáncer de mama. Hasta ahora no se han encontrado fallos o contraindicaciones que limiten demasiado su uso.

La cámara como tal tiene un precio que no llega a más de 200 dólares. No necesita fuentes de iluminación excepcionales para poder funcionar. Y es el doble de práctica que el resto de instrumentos conocidos para esto. Hasta los momentos queda esperar a que pueda llegar a todos los quirófanos donde se le necesite.

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